racionalidade e epistemologia

domingo, 20 de março de 2011

Líbia, "la piedra del tiempo": mis condolencias a toda la humanidad!

Una vez más los intereses estratégicos occidentales confiere autorizar a uno masacre contra la población y la destrucción de un país soberano. La autodeterminación de los pueblos es mismo "letra muerta" para los dueños del capital. Por lo tanto, Líbia es "la piedra del tiempo". Bajo el pretexto de defensa de civiles (armados contra el Estado), la llamada "coalición" (lease, EE.UU. y sócios) no dude en atacar el pueblo líbio, matar civiles indefensos en escala y destruir la infraestructura de la nación más próspera de la región! No compartimos esta actitud y no discutiremos aqui el mérito de los conflictos internos de Líbia, pero sé que en todas partes hay descontentos y traidores de la patria. ?Es esto la democracia? Los mismos personagens que apoyan a los rebeldes en Líbia, paradójicamente, apoyan la represión contra manifestantes no Bahrein! Solamente intereses escusos explican esto! Sólo la racionalidad de la ganancia puede explicar la barbárie contra los que no hizo daño a sus verdugos! Sí realmente queria poner fin a las dictaduras en el mundo,sería importante comenzar en Arábia Saudita, onde las mujeres no pueden, ya sea, votar! No, este país es un amigo de occidente! Evidentemente, la idea que prevalece en el discurso único (ya, en las mentes del pueblo), es el retiro de los gobiernos cuya ideologia no coincide com el capitalismo selvagen, lo qual concentra la riqueza y distribuye la pobreza. Véase el caso de Venezuela y Cuba: por qué meterse com un gobierno legitimo? Porque es Socialista, nacionalista? Porque actua en defensa de los más humildes y no lo permite la concentración? Sin embargo, si la democracia es lo que están haciendo, ya no podemos más confiar en ella! Mañana, ellos podrían hacer lo mismo con mi país porque son expertos en criar pretextos para intervenir en las naciones, sin verguenza ni humanidad. Tengo en cuenta, que la autodeterminación de los pueblos, de hecho, sólo se producen en el dia que países con largo peso economico y/o militar se unem con otros de vocaciones de respecto a la soberania de las naciones para hacer frente a los bárbaros. En esta perspectiva, China, Russia, Brasil, Venezuela, Cuba y otros constituense en esperanza para protagonizar papel principal en la construcción de un mundo más respetuoso en el futuro. Hasta entonces, mis condolencias a toda la humanidad, en especial a los pueblos que optaram por una sociedad más igualitaria, y por esta razón son atacados por los saqueadores todos los dias.

sexta-feira, 18 de março de 2011

OBAMA NO BRASIL: o renascimento da subserviêcia?

A visita do Presidente dos EUA ao Brasil é eivada de indagações sobre suas finalidades subliminares. Evidentemente, depois de oito anos de Governo Lula, onde as relações bilaterais entre os dois países perderam consistência em prejuízo dos interesses de "tio sam", a Sr.a Dilma Roussef deu-lhes a esperança para o reinício de conversações que lhes sejam mais interessantes. Dilma Roussef resolveu mesmo a fazer o contrário de tudo aquilo que que seu "ex-chefe político" ensinou. Ao deslocar o eixo de nossas transações comerciais com os EUA (mais de 50%, reduzidas para menos de 30%), Lula criou uma situação ruim para eles. Na prática, isso significou não apenas a perda de negócios mas, sobretudo, a perda de capacidade para influenciar nossas políticas interna e externa: engoliram tudo isso com dificuldade. Mas para o Brasil, as estratégias do governo Lula melhoraram em muito nossas condições para enfrentar as barreiras comerciais e as crises geradas pelas economias de ponta. Mas,mesmo não gostando da independência com que o Brasil administrou essas e outras questões, os EUA tiveram que reconhecer publicamente a sensatez e o caráter pacifista de Lula no trato dos conflitos internacionais, ainda que o cutucassem chamando-o de ingênuo. A realidade de conquistas no campo dos negócios e das políticas externas não deveriam retroceder. Ocorre que agora, a Sra. Roussef, preocupada com os direitos humanos (parece que é o ítem número um de sua agenda), defenestra qualquer tipo ação punitiva e desconsidera a soberania das nações e das culturas. Isto é um "prato-cheio" para "tio sam" entender como um recado de apoio às suas pregações sobre o assunto e buscar uma retomada das antigas relações. Aliás, tem muitos "brasileiros" que defendem isso! Não creio que a Presidenta tenha em mente reativar o velho relacionamento de subserviência aos interesses do norte, porém, suas declarações são perigosas na medida em que apresentam semelhança com os anseios obtusos dos EUA. Parece que aí, há uma certa ingenuidade. Exemplo disso é a falta de uma posição objetiva em relação à intervenção na Líbia e permitir passivamente a criação da chamada "zona de exclusão", leia-se "zona de ataque". Não precisa ser especialista em conflitos armados para saber que a posição norte-americana sobre esse assunto já estava definida: retirar Kadafi a pretexto de violação dos direitos humanos de pessoas armadas que se insurgem contra o governo! A iminência da retomada do controle do país pelas forças do governo gerou pânico e precipitou a decisão do Conselho de Segurança do ONU! Vamos dificultar sua vida enquanto ainda há insurgentes! Espera-se que Dilma Roussef reflita um pouco mais e aproveite a estada de Obama no Brasil para deixar claro que esta nação não deseja o retorno à subserviência e, vai continuar defendendo a autodeterminação dos povos. A autonomia e o respeito perante o mundo conquistados em oito anos, não podem ser jogados no lixo. Esta nação quer soberania, relações respeitosas e paz.

domingo, 6 de março de 2011

La guerra inevitable de la OTAN

Por entender que o conflito na Líbia tem outras conotações que vão além daquelas veiculadas pela mídia convencional, hoje dedico este espaço à publicação de um texto encontrado no Blog de Maria de los Dolores Estebaranz em 03/03/2011. http://bloguerosrevolucion.ning.com/profiles/blogs/la-guerra-inevitable-de-la As reflexões de Fidel Castro revelam um pouco da realidade daquele país, historicamente explorado pelo capitalismo central, o qual mais uma vez tenta impor seus interesses estratégicos em uma nação soberana (já boicotada comercial e politicamente, a pretexto de levar democracia! Reflexiones del compañero Fidel A diferencia de lo que ocurre en Egipto y Túnez, Libia ocupa el primer lugar en el Índice de Desarrollo Humano de África y tiene la más alta esperanza de vida del Continente. La educación y la salud reciben especial atención del Estado. El nivel cultural de su población es sin dudas más alto. Sus problemas son de otro carácter. La población no carecía de alimentos y servicios sociales indispensables. El país requería abundante fuerza de trabajo extranjera para llevar a cabo ambiciosos planes de producción y desarrollo social. Por ello suministraba empleo a cientos de miles de trabajadores egipcios, tunecinos, chinos y de otras nacionalidades. Disponía de enormes ingresos y reservas en divisas convertibles depositadas en los bancos de los países ricos, con las cuales adquirían bienes de consumo e incluso, armas sofisticadas que precisamente le suministraban los mismos países que hoy quieren invadirla en nombre de los derechos humanos. La colosal campaña de mentiras, desatada por los medios masivos de información, dio lugar a una gran confusión en la opinión pública mundial. Pasará tiempo antes de que pueda reconstruirse lo que realmente ha ocurrido en Libia, y separar los hechos reales de los falsos que se han divulgado. Emisoras serias y prestigiosas, como Telesur, se veían obligadas a enviar reporteros y camarógrafos a las actividades de un grupo y a las del lado opuesto, para informar lo que realmente ocurría. Las comunicaciones estaban bloqueadas, los funcionarios diplomáticos honestos se jugaban la vida recorriendo barrios y observando actividades, de día o de noche, para informar lo que estaba ocurriendo. El imperio y sus principales aliados emplearon los medios más sofisticados para divulgar informaciones deformadas sobre los acontecimientos, entre las cuales había que inferir los rasgos de la verdad. Sin duda alguna, los rostros de los jóvenes que protestaban en Bengasi, hombres, y mujeres con velo o sin velo, expresaban indignación real. Se puede apreciar la influencia que todavía ejerce el componente tribal en ese país árabe, a pesar de la fe musulmana que comparte sinceramente el 95% de su población. El imperialismo y la OTAN ─seriamente preocupados por la ola revolucionaria desatada en el mundo árabe, donde se genera gran parte del petróleo que sostiene la economía de consumo de los países desarrollados y ricos─ no podían dejar de aprovechar el conflicto interno surgido en Libia para promover la intervención militar. Las declaraciones formuladas por la administración de Estados Unidos desde el primer instante fueron categóricas en ese sentido. Las circunstancias no podían ser más propicias. En las elecciones de noviembre la derecha republicana propinó un golpe contundente al Presidente Obama, experto en retórica. El grupo fascista de “misión cumplida”, apoyado ahora ideológicamente por los extremistas del Tea Party, redujo las posibilidades del actual Presidente a un papel meramente decorativo, en el que peligraba incluso su programa de salud y la dudosa recuperación de la economía, a causa del déficit presupuestario y el incontrolable crecimiento de la deuda pública, que batían ya todos los records históricos. Pese al diluvio de mentiras y la confusión creada, Estados Unidos no pudo arrastrar a China y la Federación Rusa a la aprobación por el Consejo de Seguridad de una intervención militar en Libia, aunque logró en cambio obtener, en el Consejo de Derechos Humanos, la aprobación de los objetivos que buscaba en ese momento. Con relación a una intervención militar, la Secretaria de Estado declaró con palabras que no admiten la menor duda: “ninguna opción está descartada”. El hecho real es que Libia está ya envuelta en una guerra civil, como habíamos previsto, y nada pudo hacer Naciones Unidas para evitarlo, excepto que su propio Secretario General regara una buena dosis de combustible en el fuego. El problema que tal vez no imaginaban los actores es que los propios líderes de la rebelión irrumpieran en el complicado tema declarando que rechazaban toda intervención militar extranjera. Diversas agencias de noticias informaron que Abdelhafiz Ghoga, portavoz del Comité de la Revolución declaró el lunes 28 que “‘El resto de Libia será liberado por el pueblo libio’”. “Contamos con el ejército para liberar Trípoli’ aseguró Ghoga durante el anuncio de la formación de un ‘Consejo Nacional’ para representar a las ciudades del país en manos de la insurrección.” “‘Lo que queremos es informaciones de inteligencia, pero en ningún caso que se afecte nuestra soberanía aérea, terrestre o marítima’, agregó, durante un encuentro con periodistas en esta ciudad situada 1.000 km al este de Trípoli.” “La intransigencia de los responsables de la oposición sobre la soberanía nacional reflejaba la opinión manifestada en forma espontánea por muchos ciudadanos libios a la prensa internacional en Bengasi”, informó un despacho de la agencia AFP el pasado lunes. Ese mismo día, una profesora de Ciencias Políticas de la Universidad de Bengasi, Abeir Imneina, declaró: “Hay un sentimiento nacional muy fuerte en Libia.” “‘Además, el ejemplo de Irak da miedo al conjunto del mundo árabe’, subraya, en referencia a la invasión norteamericana de 2003 que debía llevar la democracia a ese país y luego, por contagio, al conjunto de la región, una hipótesis totalmente desmentida por los hechos.” Prosigue la profesora: “‘Sabemos lo que pasó en Irak, es que se encuentra en plena inestabilidad, y verdaderamente no deseamos seguir el mismo camino. No queremos que los norteamericanos vengan para tener que terminar lamentando a Gadafi’, continuó esta experta.” “Pero según Abeir Imneina, ‘también existe el sentimiento de que es nuestra revolución, y que nos corresponde a nosotros hacerla’.” A las pocas horas de publicarse este despacho, dos de los principales órganos de prensa de Estados Unidos, The New York Times y The Washington Post, se apresuraron en ofrecer nuevas versiones sobre el tema, de lo cual informa la agencia DPA al día siguiente 1º de marzo: “La oposición libia podría solicitar que Occidente bombardee desde el aire posiciones estratégicas de las fuerzas fieles al presidente Muamar al Gadafi, informa hoy la prensa estadounidense.” “El tema está siendo discutido dentro del Consejo Revolucionario libio, precisan ‘The New York Times’ y ‘The Washington Post’ en sus versiones online.” “‘The New York Times’ acota que estas discusiones ponen de manifiesto la creciente frustración de los líderes rebeldes ante la posibilidad de que Gadafi retome el poder”. “En el caso de que las acciones aéreas se realicen en el marco de las Naciones Unidas, éstas no implicarían intervención internacional, explicó el portavoz del consejo, citado por ‘The New York Times’.” “El consejo está conformado por abogados, académicos, jueces y prominentes miembros de la sociedad Libia.” Afirma el despacho: “‘The Washington Post’ citó a rebeldes reconociendo que, sin el apoyo de Occidente, los combates con las fuerzas leales a Gadafi podrían durar mucho y costar gran cantidad de vidas humanas.” Llama la atención que en esa relación no se mencione un solo obrero, campesino, constructor, alguien relacionado con la producción material o a un joven estudiante o combatiente de los que aparecen en las manifestaciones. ¿Por qué el empeño en presentar a los rebeldes como miembros prominentes de la sociedad reclamando bombardeos de Estados Unidos y la OTAN para matar libios? Algún día se conocerá la verdad, a través de personas como la profesora de Ciencias Políticas de la Universidad de Bengasi, que con tanta elocuencia narra la terrible experiencia que mató, destruyó los hogares, dejó sin empleo o hizo emigrar a millones de personas en Iraq. Hoy miércoles dos de marzo, la Agencia EFE presenta al conocido vocero rebelde haciendo declaraciones que, a mi juicio, afirman y a la vez contradicen las del lunes: “Bengasi (Libia), 2 de marzo. La dirección rebelde libia pidió hoy al Consejo de Seguridad de la ONU que lance un ataque aéreo ‘contra los mercenarios’ del régimen de Muamar el Gadafi.” “‘Nuestro Ejército no puede lanzar ataques contra los mercenarios, por su papel defensivo’, afirmó el portavoz rebelde Abdelhafiz Ghoga en una conferencia de prensa en Bengasi.” “‘Es diferente un ataque aéreo estratégico que una intervención extranjera, que rechazamos’, recalcó el portavoz de las fuerzas de oposición, que en todo momento se han mostrado en contra de una intervención militar extranjera en el conflicto libio”. ¿A cuál de las muchas guerras imperialistas se parecería esta? ¿La de España en 1936, la de Mussolini contra Etiopía en 1935, la de George W. Bush contra Iraq en el año 2003 o a cualquiera de las decenas de guerras promovidas por Estados Unidos contra los pueblos de América, desde la invasión de México en 1846, hasta la de Las Malvinas en 1982? Sin excluir, desde luego, la invasión mercenaria de Girón, la guerra sucia y el bloqueo a nuestra Patria a lo largo de 50 años, que se cumplirán el próximo 16 de abril. En todas esas guerras, como la de Vietnam que costó millones de vidas, imperaron las justificaciones y las medidas más cínicas. Para los que alberguen alguna duda, sobre la inevitable intervención militar que se producirá en Libia, la agencia de noticias AP, a la que considero bien informada, encabezó un cable publicado hoy, en el que se afirma: “Los países de la Organización del Tratado del Atlántico (OTAN) elaboran un plan de contingencia tomando como modelo las zonas de exclusión de vuelos establecidas sobre los Balcanes en la década de 1990, en caso de que la comunidad internacional decida imponer un embargo aéreo sobre Libia, dijeron diplomáticos”. Más adelante concluye: “Los funcionarios, que no podían dar sus nombres debido a lo delicado del asunto, indicaron que las opciones que se observan tienen punto de partida en la zona de exclusión de vuelos que impuso la alianza militar occidental sobre Bosnia en 1993 que contó con el mandato del Consejo de Seguridad, y en los bombardeos de la OTAN por Kosovo en 1999, QUE NO LO TUVO”. Fidel Castro Ruz Marzo 2 de 2011 8 y 19 p.m.